Queda pendiente contestar a la pregunta sobre qué diferencia hay entre los navegan por internet dando a concer su identidad real, nombre, apellidos y datos bibliográficos variopintos, y los que no.
Pero es que antes de ver la respuesta, que queda para un próximo episodio del rant anónimo, voy a intentar explicar porque no creo que tenga sentido, en el 99,99% de los casos, establecer esa diferencia entre gente anónima y gente no anónima y porque es mejor eso que la alternativa.
Supongamos que de repente me pongo a publicar un blog nuevo y lo llamo "Blog de Valeriana ApellidoReal, jubilada extremeña". ¡Qué peligro tiene esto de ir cogiéndole el gustillo al asunto de abrir blogs! >:)
Valeriana es una vecina de mi pueblo muy mayor que no sabe leer. Pero en el ancho mundo virtual de la internet no creo que nadie más que yo, algún amigo de los que vamos allí desde Madrid y algún chaval del pueblo lo sepa.
Así pues el blog de Valeriana se llena de posts sobre las cosas de su pequeño pueblo extremeño con sumo realismo (en realidad yo transcribo sus palabras): habla de los forasteros (inmigrantes), de lo pequeño de la pensión, de que en las residencias de ancianos no admiten gallinas (habrase visto ¬¬), etc...
¿Cómo saben los demás internautas que la que escribe el blog no es Valeriana? ¿Cómo se entera Valeriana de que alguien está escribiendo un blog en su nombre?
No todo el mundo tiene un identidad fácilmente identificable, valga la redundancia, fuera de un círculo relativamente reducido de compañeros de trabajo, conocidos, amigos y familiares ni todo el mundo mira los buscadores a ver si su nombre sale en ellos asociado a si mismo o a otra persona (que además puede actuar de buena fé y llamarse igual).
Bueno, me direís, esos son casos muy desfavorables de gente que no puede salir del anonimato porque es gente anónima en la vida real. Vale, así es, pero es que son/somos mucha gente.
Ahora supongamos que una persona consigue establecer una correspondencia entre su identidad real y su identidad en internet, por ejemplo porque participa en eventos y mesas redondas blogueras. Una persona que ya no es tan anónima en la vida real.
¿Cómo se puede garantizar que todos y cada uno de los comentarios hechos con su nombre o nick habitual son suyos? Vamos que cuando escribe en su blog está claro, pero ¿y fuera de él? Incluso en los sitios donde se exige registro como flickr o blogger: ¿Cómo se puede hacer para evitar que alguien registre tu nombre o nick habitual?
Hasta que se exija la firma electrónica en internet para navegar _todos_ somos anónimos y todos los supuestamente no anónimos corren el peligro de ver suplantada su identidad "real".
¿Parece horrible tanta posible confusión de identidades?
Pues que quereís que os diga, personalmente me alegro mucho de que el Gran Hermano (todavía) no haya aparecido por aquí para hacernos circular con el carnet electrónico en la boca del lector de tarjetas del teclado.
Y no especialmente por mi misma, si no por los bloggers activistas de los que se habla en
Irrepressible.info, por ejemplo.
A todos los que atacan a los anónimos en internet porque piensan que todo el mundo debería tener una identidad establecida yo les preguntaría:
¿Queremos realmente los internautas que se exija una identificación electrónica con un organismo certificador para opinar en internet?
¿Hay otra alternativa si realmente se quiere estar seguro de quien es quien en internet?
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